¿Estás listo para la gran aventura de viajar en caravana? Viajar en caravana significa ir por el mundo sin horarios y disfrutando cada kilómetro del camino. Esta mega guía te ayudará a prepararte para un viaje seguro y divertido.
Las caravanas —o más bien sus propietarios— pueden clasificarse básicamente en tres grandes grupos: los que usan la caravana para viajar, los que la utilizan para dejarla fija o de temporada en un camping para pasar allí los fines de semana / puentes / vacaciones, y los que combinan ambas modalidades.
En esta guía para viajar en caravana vamos a centrarnos exclusivamente en los viajes en caravana: conceptos básicos de conducción, consejos, como planificar las rutas, escoger campings o lugares para pernoctar, etc. Todo ello, fruto de nuestra experiencia de viajar en caravana y disfrutar con ella por España y Europa.
Contenido del artículo
- 1 Guía para viajar en caravana: Conceptos básicos
- 2 Viajar en caravana con un buen seguro
- 3 Planifica tu ruta óptima y el itinerario para viajar en caravana
- 4 Reserva campings adaptados a tu estilo de viaje
- 5 Caramaps, la mejor aplicación para caravanas
- 6 Homecamper, vida más allá de los campings
- 7 Pernoctar en áreas de autopista
- 8 ¿Viajar en ferry con caravana?
- 9 Revisa las leyes y normas de los países a los que vas a viajar
- 10 Prepara tu caravana para el viaje
- 11 Haz una lista de verificación (check list) antes de salir
- 12 Viajar en caravana: Comer y cocinar
- 13 Consideración final: no te agobies si no puedes ver todo lo que tenías previsto
- 14 Te puede interesar
👉🏽 Carcasona es Patrimonio de la Humanidad, además de un lugar de cuento de hadas de esos a los que siempre gusta volver. Un maravilloso ejemplo de cómo era una ciudad amurallada (llena de gente :-) en la Edad Media: ‘La Cité’ de Carcassonne, una ciudad de película única en Europa
Guía para viajar en caravana: Conceptos básicos
Viajar en caravana no conlleva demasiada dificultad. Cualquiera puede hacerlo. Aun así es necesario tener en cuenta algunos conceptos básicos sobre como viajar en caravana, para evitar sorpresas desagradables y fácilmente evitables. Sobre todo durante las primeras salidas, cuando todavía no estás habituado a las eventualidades que se puedan presentar.
Para empezar, algo obvio pero importante para viajar en caravana: el conjunto coche + caravana pesa mucho más que el coche solo. Hay que sumar entre unos 750 y 1500 kilos o más, aproximadamente y dependiendo de la caravana. Y lógicamente, también tiene una longitud mucho mayor. Puede llegar fácilmente a los 11 o 12 metros de largo, como en nuestro caso. Todo ello afecta a la conducción.
👉🏽¿Qué caravana elegir? ¿Qué permisos se necesitan para remolcar una caravana? ¿La MMA, MMC o la Carga útil te suenan a chino? Te damos algunos consejos prácticos para comprar una caravana.
Conducir una caravana con tu vehículo
Algunas situaciones habituales al viajar en caravana donde se hace evidente el peso adicional es al arrancar, acelerar o adelantar; al subir pendientes o al frenar. Hay que frenar con suavidad, siempre recordando que detrás llevas un peso de 1 tonelada o más. En cuanto a la longitud, es especialmente notoria durante las maniobras de estacionamiento. Y más siendo un conjunto articulado, que las complica un poco más.
Por ello hay que poner especial atención en lugares estrechos o al realizar curvas cerradas, en las cuales hay abrir un poco más el ángulo de giro. En cuanto a la velocidad, intenta mantenerla constante, sin acelerones innecesarios que aumentan el consumo de combustible. Y por supuesto, dentro de los límites de velocidad permitidos.
👉🏽 Si no tienes caravana, en el post Alquilar una caravana, la opción rutera para un viaje diferente, te explico como y dónde puedes alquilar una. Y si ya la tienes, te explico cómo ganar algún dinerillo extra alquilándola. Lo mismo para autocaravanas y furgos.
En España, las caravanas tienen una limitación de velocidad de 90 km/h en autopistas y autovías y 80 km/h en carreteras convencionales. Sobre este punto, cabe recordar que viajar en caravana es no tener prisa para llegar a ningún sitio. Si tienes prisa, no viajes en caravana.
Tú decides dónde y cuando parar en ruta. Sin horarios, sin prisas. La caravana es para disfrutar de cada kilómetro del viaje, llevando tu casa contigo y los tuyos. A cambio, tan solo debes aplicar el sentido común, respetar unas normas básicas y conducir sin sobrepasar los límites de velocidad.
ℹ Importante:
Durante el trayecto está terminantemente prohibido viajar en el interior de la caravana.
El «efecto venturi»
Un fenómeno que puede sorprenderte al viajar en caravana es el «efecto venturi». Lo provoca la diferencia de presión entre dos vehículos circulando en paralelo. Dicho fenómeno se nota al ser adelantado por un vehículo voluminoso, como una furgoneta, un camión o un autobús. Acostumbra percibirse en vías donde se circula a altas velocidades, como las autopistas.
A efectos prácticos, el «efecto venturi» causa una ligera oscilación o bamboleo de la caravana, y una ligera sensación de pérdida de control del conjunto. No es nada raro ni grave. Es algo frecuente, a lo que te acostumbras en cuanto te han adelantado unos cuantos camiones. Yo no conocía el fenómeno, y el primer día que salí con la caravana a la autopista me sorprendió. No fue agradable.
En A Veces Veo Viajes tenemos una categoría exclusiva sobre el mundo de las caravanas: reseñas de caravanas y campings, rutas, crónicas caravanistas, etc. Échale un vistazo 👉🏽 Viajar en Caravana.
Enseguida aprendes a convivir con esas pequeñas oscilaciones de la caravana en momentos puntuales. Incluso es posible, dependiendo de tu conjunto, que ni las llegues a notar. En todo caso, ten en cuenta que es algo normal. Se pueden minimizar arrimándote todo lo que puedas a la derecha de la calzada cuando te vaya a adelantar un vehículo voluminoso.
El viento
El viento es enemigo de las caravanas. Son tan aerodinámicas como una caja de zapatos, y poco pesadas en relación a su volumen. El viento es especialmente peligroso cuando sopla por rachas y lateralmente. En todo caso, el consejo principal es usar sentido común y hacer caso a nuestra intuición.
Al viajar en caravana con viento, hay que reducir la velocidad hasta que desaparezca cualquier balanceo o movimiento anormal de la caravana. Mucho cuidado en adelantamientos a/de otros vehículos voluminosos, y mucha precaución en los túneles, donde el viento desaparece y puede reaparecer repentina y violentamente al salir de él.
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Si el viento va para largo (consulta la previsión meteorológica) puedes optar por salir de la autopista y continuar el viaje por carreteras secundarias, normalmente más resguardadas y donde se circula más despacio. Sea como sea, si conduciendo percibes sensaciones de inseguridad o pérdida de control por causa del viento, para en el primer lugar seguro que encuentres. Aprovecha para descansar, desayunar, comer, cenar o dormir. Ya sabes:
«Viajar en caravana es no tener prisa para llegar a ningún sitio. Si tienes prisa, no viajes en caravana.»
Viajar en caravana con un buen seguro
No es lo mismo usar la caravana para desplazarte unos pocos kilómetros hasta tu camping habitual que viajar en caravana por España o Europa durante un mes o más. Tener un buen seguro siempre es importante, pero cuando vas a realizar viajes largos, de cientos o miles de kilómetros, es imprescindible.
Asegúrate de que tanto el coche como la caravana estén cubiertos ante cualquier eventualidad. Tanto si tienes un accidente como si necesitas asistencia en caso de una avería o un pinchazo, por ejemplo. Asistencia para el coche y para la caravana en circulación y en reposo. Existen muchas compañías, solo tienes que buscar un poco y comparar. No está de más que preguntes en algún foro como Webcampista para conocer experiencias.
Lee bien la letra pequeña y las coberturas. Si vas a viajar en caravana por Europa, Fíjate bien que el seguro te cubra en todos los países por donde vas pasar. Y ante la más mínima duda, pregunta. PREGUNTA. Es muy importante. Nosotros estuvimos viajando por Europa durante un mes y medio con un seguro de asistencia que solo nos cubría en viajes por España. Sin saberlo, evidentemente.
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Tuvimos la fortuna de no sufrir ningún percance. En caso contrario nos hubiésemos llevado una desagradable sorpresa. Y eso que cuando contratamos el seguro dejamos bien claro que lo queríamos para viajar en caravana por Europa. La persona que nos atendió, o bien cometió un error o bien era una inepta. Nosotros también tuvimos parte de culpa, por no leer bien el contrato.
Tras la experiencia, cambiamos de compañía. No fue mejor. Un temporal de viento y lluvia nos destrozó el toldo durante un viaje a Eslovenia. La compañía no quiso pagar alegando que los motivos por los que se rompió el toldo no estaban incluidos. Incluso se atrevieron a contradecirnos de cómo sucedieron los hechos, cuando nosotros estábamos allí y ellos no. Lamentable.
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Fue otro mal trago, y volvimos a cambiar de compañía, en la que continuamos. Queremos viajar en caravana sin preocupaciones, y dedicarnos solo disfrutar. De momento no tenemos ninguna queja, nos han atendido un par de veces por incidentes menores. Esperemos que no nos haga falta para nada más grave.
Asegurar el coche + la caravana a todo riesgo y con asistencia en toda Europa es una inversión importante. Alrededor de 800 € al año. Puede variar de una compañía a otra, evidentemente. También puedes viajar solo con un seguro a terceros, con menos coberturas y sin asistencia en carretera. Eso es algo que tú decides. Nosotros lo tenemos claro.
Seguro de viajes
A parte de los anteriores, para viajar en caravana al extranjero también es importante un seguro de viajes. La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) es imprescindible y gratuita: te cubre cuando viajas por Europa, puedes recibir asistencia sanitaria y solicitar el reembolso de los gastos en las mismas condiciones que los ciudadanos del país en que te encuentres. La puedes pedir aquí.
Pero la TSE tiene muchas limitaciones. Por ejemplo, no sirve en caso de salvamento y repatriación. Si quieres disponer de transporte gratuito para volver a tu país en caso de enfermedad grave o incapacidad por accidente durante una estancia en otro país de la UE, necesitarás otro seguro. Más info sobre la TSE en: europa.eu.
Por ello, para viajar en caravana, o para cualquier otro tipo de viaje, es más que aconsejable contratar un seguro de viajes. Tendrás cubiertos los gastos médicos, repatriación, anulación de viaje, y muchas otras coberturas. Nosotros siempre viajamos con seguro de viajes. Échale un vistazo, no pierdes nada:
Asistencia y gastos médicos en viaje, Asistencia con Telemedicina 24/7 por videoconsulta, cancelación y anulación del viaje, pérdida de servicios contratados, regreso anticipado, etc. Viajar con la seguridad de tener las espaldas bien cubiertas es algo esencial. Con A Veces Veo Viajes tienes descuento en InterMundial!
Planifica tu ruta óptima y el itinerario para viajar en caravana
No nos gusta llegar a un lugar que teníamos previsto visitar y darnos cuenta de que no existe ningún camping cercano. O llegar tarde y encontrar el camping cerrado. O circular por una carretera muy estrecha, con cuestas terribles y curvas imposibles. O que el acceso al camping sea complicado… Para minimizar riesgos, nada mejor que una buena planificación.
Hay que tener en cuenta que viajar en caravana es más pausado que viajar solo con el coche. La velocidad es menor, por lo que se invierte más tiempo para llegar al destino. Por otro lado, hay que prever las paradas para descansar, cada dos horas como máximo.
En cada parada, tomamos un café en el área de servicio o aprovechamos para comer. En trayectos largos, calculamos una media de 15-20 minutos para cada parada, que hay que sumar al tiempo total del trayecto.
Planificación de la ruta e itinerario (caso práctico)
Nuestro método para viajar en caravana es sencillo, aunque requiere algo de trabajo previo. En primer lugar, hacemos una lista con los destinos principales del viaje. Vamos a tomar como ejemplo un caso real:
Destinos principales: Budapest, Viena y Praga. Punto de partida y regreso: Tarragona. Introducimos los datos en Google Maps o Vía Michelín. Este primer mapa resulta muy útil, ya que te permite descubrir de un vistazo y en su conjunto la ruta propuesta:
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Evidentemente, puedes modificar el mapa tanto como desees, añadiendo o restando destinos, o modificando las rutas para pasar por ciudades y regiones distintas. Las combinaciones son infinitas. Google Maps o Vía Michelín solo te muestran las opciones más cortas y rápidas, pero tú decides.
El siguiente paso es concretar dónde vamos a realizar las paradas / pernoctaciones en ruta. En trayectos largos acostumbramos a realizar unos 500 km o unas 6 horas al día como máximo, aproximadamente. Por lo tanto, es necesario tener previsto un lugar donde pasar la noche cada 500 km más o menos. De nuevo, Google Maps nos puede ser útil para buscar esos lugares.
Nuestro objetivo en este caso practico es llegar directamente a Budapest. Sin visitar nada durante el trayecto. Solo dormir y continuar al día siguiente. Antes de emprender cualquier viaje, siempre planificamos los lugares donde pernoctar, lo más cercanos posible a la ruta. Casi siempre campings. Cuando los encontramos, los reservamos antes de salir.
La distancia Tarragona – Budapest es de 2.000 km, así que calculamos 3 etapas antes de llegar a la capital húngara. La primera noche la planificamos cerca de Montpellier (Francia), en una finca privada que encontramos en Homecamper. La segunda en Cremona, Italia (Camping Parco al Po) y la tercera en Máribor, Eslovenia (Camping Center Kekec):
ℹ Encontrarás información detallada sobre este viaje en
Ruta en caravana por Europa (1): Destino Budapest
Si no hay o no encontramos campings ni fincas privadas cercanas a la ruta (más adelante te explico lo de las fincas privadas), como último recurso pernoctamos en alguna área de servicio. Es el único caso en que no reservamos, ya que obviamente no se puede.
Este viaje fue excepcional en este sentido. Habitualmente nos tomamos más tiempo para llegar al destino principal, visitando algunos lugares en el camino. Dos, tres o cuatro días en cada etapa, dependiendo del interés del sitio en cuestión. Y del tiempo de vacaciones del que dispongamos, claro.
Una vez visitados los 3 destinos principales del viaje (Budapest, Viena y Praga), empezamos el regreso a casa. Pero a diferencia de la ida, la vuelta es muy tranquila. Antes de emprender el viaje, también planificamos las etapas para la vuelta. Siempre a distancias asequibles para realizar en un día, y con los campings reservados.
En este caso, después de Praga establecimos la siguiente etapa en Núremberg (Alemania), donde pasamos 4 días. Luego otra etapa de 6 días en Riquewihr (Alsacia, Francia). A continuación 4 días en Lyon (Francia); y antes de llegar a casa teníamos previsto pernoctar en Narbona, pero al final realizamos todo el trayecto hasta Tarragona.
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Reserva campings adaptados a tu estilo de viaje
Si, es cierto que no siempre puedes escoger el camping que te gustaría. Tal vez en la zona no hay mucha oferta, por ejemplo. Aun así, hay algunos aspectos generales a tener en cuenta. Si la estancia en el camping va a ser solo para pernoctar y seguir el viaje a la mañana siguiente, cualquier camping vale. No vas a pasar tiempo en él.
La cosa cambia si vas a pasar varios días en el mismo camping. Y también si vas a ir en invierno o en verano. Si vas a viajar en verano, posiblemente prefieras disponer de piscina. Y si vas en invierno, una piscina climatizada no estaría mal.
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Si viajas con niños, es un puntazo que el camping tenga un buen parque infantil y animación para ellos, y mejor todavía si hay mini-club. Podrás dejar a tus hijos en buenas manos mientras te relajas en la caravana, te bañas en la piscina o te tomas una cerveza en la terraza del bar.
En viajes largos, donde vas a estar visitando lugares desconocidos todo el día, cuando regresas al camping al atardecer se agradece que disponga de algunas comodidades. Bar, restaurante, actividades nocturnas como pequeños conciertos o espectáculos, la anhelada piscina para relajarte un rato antes de cenar…
En cualquier caso, las instalaciones y el camping en general han de estar bien cuidadas y limpias. Especialmente los bloques de sanitarios, fregaderos y duchas. Que haya agua abundante para ducharse. Caliente, por supuesto. ¿Césped en las parcelas? mejor que mejor. ¿Tomas de corriente y agua? cuanto más cercanas mejor.
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No te conformes con visitar la página del camping o la página de reservas de terceros. Lee las reseñas en sitios como Google o TripAdvisor. Siempre. Y muy especialmente en caso de dudar entre dos o más campings. Si un camping tiene 1.000 reseñas malas y unas pocas buenas, tantas personas difícilmente pueden equivocarse. Y a la inversa.
Para buscar y reservar campings, puedes hacerlo de varias formas. Existen varias plataformas de búsqueda, como Camping and CO, Campings.com o JetCamp, donde puedes buscar campings en mediante sus buscadores e incluso algunos se pueden reservar directamente desde la aplicación.
También existen otras que ofrecen importantes descuentos en temporada baja, una de las más populares a nivel europeo es ACSI CampingCard. Hay que pagar una pequeña membresía anual, pero te aseguro que si vas de camping un par de veces en temporada baja te puedes ahorrar mucho dinero. 100% comprobado.
Caramaps, la mejor aplicación para caravanas
Otra solución para buscar lugares para descansar, pernoctar o incluso desenganchar la caravana y visitar los alrededores con tu coche, es la aplicación Caramaps. Puedes calcular tu ruta de un punto a otro igual que en Google Maps o Vía Michelín, y la aplicación te mostrará en un mapa todos los lugares habilitados a lo largo de la misma.
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Caramaps tiene la interesante y práctica particularidad de que entre sus muchas opciones para filtrar resultados, existe la de «caravana permitida». Si seleccionas dicha opción, en el mapa solo aparecerán los lugares donde están permitidas las caravanas.
Haciendo clic sobre los puntos señalados en el mapa, se abre una ficha con información práctica: si el lugar es gratuito o de pago, servicios disponibles (agua potable, electricidad, vaciado de aguas negras y/o grises, parque infantil, restaurante, duchas, puntos para tirar la basura, etc).
Uno de los servicios más interesantes es «caravana desenganchada», que se ilustra en la ficha mediante el icono de una caravana sola, a diferencia del icono caravana + coche, que indica que se puede estacionar / pernoctar pero no desenganchar.
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La aplicación te mostrará todo tipo de lugares a lo largo de la ruta: campings, áreas de servicio, áreas de autopista, gasolineras, aparcamientos, áreas privadas y «anfitriones CaraMaps». Los anfitriones Caramaps son particulares que proporcionan un espacio y servicios para los autocaravanas y/o caravanas en sus fincas. Muy similar a lo que te explico en el siguiente apartado.
Homecamper, vida más allá de los campings
Al viajar en caravana durante largos trayectos, a veces es útil disponer de alternativas a parte de los campings. En el viaje que realizamos a Budapest, estrenamos la modalidad de alojarnos en una parcela privada. Fue en Saint-Martin-de-Crau, cerca de Montpellier. Se trata de un propietario particular que ofrece un espacio de su finca para acampar.
Fue una gran experiencia. Pernoctamos en una hípica, rodeados de amplios prados y cercados para caballos. Las instalaciones sanitarias eran las mismas que utilizan los trabajadores de la hípica, al lado de las cuadras. Espartanas, pero más que suficientes para pasar una noche en plena naturaleza. El mismo propietario nos facilitó un punto de conexión eléctrica.
Dichos lugares pueden encontrarse en Homecamper, una plataforma on-line en la cual se ofertan estos peculiares lugares de acampada. Su funcionamiento es muy similar a AirBnb, solo que en lugar de alquilar casas o apartamentos, Homecamper alquila parcelas en fincas particulares.
Su página web dispone de un buscador, así que resulta muy sencillo encontrar parcelas. Tan solo hay que teclear el nombre de la ciudad o pueblo que te interese, y la aplicación te mostrará todas las opciones de ese lugar y alrededores en un práctico mapa. Se pueden filtrar los resultados, por ejemplo para que solo aparezcan propiedades que admitan caravanas, entre muchos otros filtros.
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Pernoctar en áreas de autopista
La opción de pernoctar en áreas de autopista es un tema controvertido. En la comunidad de viajeros en caravana y autocaravana, sus detractores no son pocos. Los motivos casi siempre están relacionados con la inseguridad de estos lugares por la noche. Seguro que alguna vez has escuchado historias o noticias de robos en áreas de autopista.
Nosotros hemos pernoctado en áreas de autopista pocas veces, siempre en viajes largos y de manera premeditada. Llegamos con el tiempo justo para cenar algo rápido en la caravana y echarnos a dormir. Al amanecer del día siguiente, continuamos el viaje.
Lo cierto es que se optimiza mucho el tiempo: no hace falta desviarse de la ruta ni desenganchar, así que tanto la llegada como la salida son prácticamente inmediatas. Siempre procuramos aparcar lo más cerca posible de donde haya gente. Si ves otras caravanas o autocaravanas allí, ese es el lugar perfecto.
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Es cierto que en las áreas de autopista de vez en cuando se producen robos. Como en todas partes. Pero también es verdad que en las principales autopistas que atraviesan Europa, pernoctan cada noche miles y miles de vehículos de todo tipo, y a la inmensa mayoría no les pasa nada.
En definitiva, pernoctar en áreas de autopistas no es nuestra opción preferida, pero a veces es la mejor opción si el objetivo es llegar al destino lo más rápidamente posible.
¿Viajar en ferry con caravana?
Una alternativa para ahorrar tiempo, dinero y kilómetros para viajar en caravana, es realizar parte del trayecto en ferry. Por ejemplo, puedes viajar en caravana a Italia cogiendo un ferry en Barcelona, desde donde parten diariamente ferrys hacia Civitavecchia. El viaje dura unas 20 horas, así que tendrás tiempo de relajarte y pasar la noche plácidamente en un camarote (opcional).
El precio del ferry (2 personas + coche + caravana + camarote interior) es de unos 370 €. El mismo trayecto por carretera (1.280 km) son unas 17 horas de viaje, sin contar paradas. Los gastos en combustible más peajes, unos 400 euros. Calcula que tendrás que comer y dormir en ruta un par de jornadas, y si lo haces en campings o fincas privadas tienes que sumar su coste.
No hay mucha diferencia de precio. Pero en el ferry te ahorras dos días de viaje y por lo tanto, sumas dos días de vacaciones. Además llegas a Civitavecchia descansado, a punto para recorrer Italia con tu caravana. Y con una nueva experiencia en las alforjas.
Ademas, si dispones de tiempo y recursos, tu aventura puede continar hacia Croacia, Montenegro, Albania o Grecia, cogiendo otro ferry en Brindisi o Bari. Y luego regresar con la caravana siguiendo la costa. O en ferry. No seria un mal plan ¿verdad?
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Revisa las leyes y normas de los países a los que vas a viajar
Algo que hay que tener en cuenta al viajar en caravana es que no en todos los países se circula igual. Las normas en cuanto a límites de velocidad, uso de las luces, tasa límite de alcoholemia o uso obligatorio de neumáticos de invierno varían de un país a otro. Antes de salir de viaje, debes informarte al respecto si no quieres recibir alguna sorpresa en forma de multa.
Por ejemplo, los turismos y furgonetas con remolques (cuyo peso total sea menor a 3.500 kg), en España pueden circular hasta a 90 km/h por autopista. En cambio, en Bélgica y Rumanía pueden hacerlo hasta a 120 km/h. Y en Finlandia, Hungría, Noruega, Italia o Suiza el límite está en 80 km/h.
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En cuanto a la tasa de alcoholemia, puede variar desde los 0,5 g/l permitidos en España, Francia o Alemania hasta la permisividad cero en Eslovaquia, Hungría, República Checa o Rumania. Mucho ojo. Por supuesto, lo más cuerdo y prudente es no beber nada si tienes que conducir.
Viajar en caravana bien informado (o en cualquier otro medio de transporte) no cuesta demasiado. Basta una sencilla consulta en internet. Existe una página web de la Unión Europea donde encontrarás toda esa información: ec.europa.eu.
Prepara tu caravana para el viaje
Es muy importante cerciorarse de que la caravana está a punto para el viaje. Hay que realizar una inspección visual y comprobar que todo funciona correctamente. En caso de tener la caravana en un parking, no dudes en desplazarte allí unos días antes para asegurarte todo está correcto. En caso de que falte algo, tendrás tiempo de reponerlo antes de salir.
Comprueba que las botellas de butano / propano contengan gas para todo el viaje. Recuerda que en el extranjero las bombonas y conexiones son diferentes y no te servirán. No te preocupes, con una sola bombona K6 de Repsol tienes más que suficiente para cocinar durante meses. Y si es de las de 12 kg de Repsol o Cepsa, ni te cuento.
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Para la calefacción, usa el gas solo cuando sea imprescindible (pernoctaciones en ruta o fuera de campings). En los campings utiliza calefacción eléctrica. La calefacción a gas tiene un consumo elevado, y en un viaje de muchos días de duración te puedes quedar sin gas en poco tiempo.
Si viajas en invierno, utiliza propano. El butano se congela a -0,5 grados centígrados y deja de fluir; en tal caso no podrás usar el gas para nada. En cambio el propano se congela a -44 grados centígrados. Si no vas a viajar a Siberia, con el propano puedes ir tranquilamente a todas partes.
No está de más engrasar los husillos de las patas estabilizadoras, cable del freno, partes móviles del estabilizador o cabezal de enganche (pero NUNCA el alojamiento de la bola del enganche ni la bola). Échale un vistazo a la rueda jockey, presión de las ruedas (no te olvides de la rueda de repuesto) y estado general de ventanas, claraboyas y puerta.
En el interior, revisa que esté en su sitio todo lo que acostumbras a dejar siempre allí, como el alargo para la toma de electricidad, manguera de agua, cassette wc y pastillas / líquido aditivo para wc, depósito de aguas grises, utensilios de cocina, etc. Si llevas mover y/o placas solares, comprueba el estado de la batería.
Haz una lista de verificación (check list) antes de salir
Tener una lista de verificación (check list) con todo lo necesario para viajar en caravana es muy útil. Nosotros usamos una lista «reutilizable» en la aplicación Microsoft OneNote. La llevamos siempre en el móvil. La lista te permite, antes de salir de viaje, ir marcando las casillas correspondientes a medida que vas empaquetando lo que te vas a llevar.
Hay otras aplicaciones similares e igual de útiles, pero no las conocemos. OneNote se sincroniza con todos tus otros dispositivos, de manera que siempre puedes consultar o modificar la lista desde otro móvil, un ordenador portátil, etc. A la vuelta, lo desmarcas todo y tienes el check list preparado para el próximo viaje.
Con el tiempo y la experiencia, borrarás algunas cosas de la lista e incluirás otras nuevas. Con la lista de verificación te aseguras de no dejarte nada que vayas a echar de menos cuando te encuentres a 2.000 km de casa. O a 100.
También utilizamos la aplicación para llevar siempre encima el itinerario del viaje: lugares que visitar, direcciones, copias de las reservas, entradas compradas online, así como copias de documentación de los vehículos, permiso de conducir, etc.
En la lista de verificación hay que incluir detalladamente y una por una todas las cosas que te vas a llevar de viaje: ropa de cama (sábanas, cojines, edredones, fundas); ropa (pantalones, camisetas, calcetines, pijamas, bañadores, ropa interior, etc); electrónica (cargadores para el móvil, Power Bank (muy útil), disco duro con pelis, portátil, tablet, etc).
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Más: neceser (dentífrico, cepillos de dientes, champú, maquinillas de afeitar, desodorante, toallas, etc); botiquín de emergencia (termómetro, after bite, analgésicos, repelente de mosquitos, gasas, alcohol, agua oxigenada, etc); enseres de cocina (microondas, trapos de cocina, toallitas de limpieza, jabón y estropajo, etc). También algo de comida. Sobre ello te hablo en el siguiente apartado.
Justo antes de salir de viaje, con la caravana ya enganchada, date una vuelta por todo su perímetro y comprueba que funcionen todas las luces, que las ventanas, puertas y portones estén bien cerrados y por último, que la rueda jockey está asegurada en su sitio y el freno de la caravana quitado.
Y antes de arrancar, no te olvides de repasar todos los cajones y puertas de los armarios. Que estén bien cerrados. Ya hemos tenido algunas incidencias por culpa de no hacerlo. El cajón de los cubiertos por los suelos un par de veces, con el consiguiente estropicio, y un microondas a la basura al caerse de lo alto de un armario con la puerta mal cerrada. Amén.
Viajar en caravana: Comer y cocinar
En viajes largos, es inevitable comer y cocinar en la caravana. Aunque de vez en cuando comas fuera (restaurantes, bares), alguna vez tendrás que cocinar en la caravana. En nuestro caso, los viajes que realizamos por Europa con la caravana tienen una duración de unos 30 a 45 días, por lo que cocinamos mucho en la caravana.
Lleva algo de comida. Aunque en los destinos encontrarás supermercados y tiendas, no está de más que lleves algunos alimentos «de emergencia» a los que siempre puedes echar mano en caso de necesidad: latas de conservas, macarrones, arroz…
Algo muy útil para salir del paso son los platos preparados que no necesitan refrigeración, tipo marca «Carretilla». Se calientan en un par de minutos en el micro o en la cocina y están ricos. Muy útiles para preparar algo rápido cuando no tienes ganas de cocinar, o si llegas tarde y cansado al camping después de un día entero visitando pueblos y ciudades.
Por supuesto, también puedes comprar tupers de comida cocinada refrigerada aunque obviamente en este caso necesitarás una nevera para conservarlos. También es una buena opción si llevas el frigorífico funcionando en ruta, así te aseguras unos platos buenísimos que solo tendrás que calentar en la cocina. O en el micro si estás en un camping.
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Hay caravanistas que disponen de una «tienda cocina«, esto es una especie de pequeña tienda de campaña o carpa que se monta a parte, donde ubican la cocina. Así se evitan olores y humos en el interior de la caravana. Puede resultar útil, pero solo si vas a tener la caravana mucho tiempo en el mismo camping.
Viajar en caravana conlleva moverte con frecuencia de un lugar a otro y de un camping a otro. No es práctico estar montando y desmontando continuamente elementos que no son imprescindibles. Nosotros lo único que montamos y desmontamos en los campings es una mesa, sillas, tumbonas y toldo. Y este último no siempre.
Cocinar en la cocina de la caravana es lo más práctico. Para eso sirve. No hemos tenido jamás problemas de olores. Al cocinar, abre ventanas y la puerta de la caravana para que corra el aire. En verano ello no supone ningún inconveniente. En invierno es algo más incómodo, pero abrígate un poco durante el rato que cocines y listo. Luego, deja las ventanas abiertas mientras vais a lavar los platos y los dientes. Con las mosquiteras bajadas siempre, lógicamente.
No cocines fritos. Si se te ocurre freír sardinas en el interior de la caravana, seguro que van a quedar olores. Así que no lo hagas. Puedes hervir verduras o pasta, calentar leche, platos preparados, purés o caldos, o prepararte unas buenas ensaladas.
Puedes cocinar de vez en cuando alguna carne a la plancha o frankfurts, con muy poco o nada de aceite. Para ello, son muy útiles las sartenes con tapa. Evitan salpicaduras y olores. Opcionalmente, puedes llevar una barbacoa portátil y cocinar en el exterior las carnes y pescados. Aunque debes saber que en algunos campings no están permitidas las barbacoas, por las molestias que provocan a los demás campistas.
Consideración final: no te agobies si no puedes ver todo lo que tenías previsto
A veces puede ocurrir que no tengas tiempo de visitar todo lo que tenías previsto. Igual se tira una semana lloviendo a cántaros. Puede que algún día tengas un leve malestar y te apetezca quedarte en la caravana o el camping. O simplemente, porque estás tan a gusto en el camping que no quieres salir de él.
Hace tiempo que aprendimos que viajar en caravana es viajar sin prisas. Y eso se aplica a todo. Por ejemplo, puede que tu hijo haga amiguitos en un camping donde solo vais a pasar unos pocos días. Pues os quedais en el camping. Y ya está. Ya volverás a visitar ese lugar que llevas apuntado en la agenda. No se va a mover de allí. Estás de vacaciones. Disfruta. Sin agobios de ningún tipo.
La grandeza del campismo y el caravanismo, es que además de visitar ciudades, pueblos y lugares, visitas muchos campings. Si te gusta este mundillo, los campings son un destino por si mismos. Cada uno es un microcosmos único. Hay campings de los que no quieres salir…
Espero que esta guía para viajar en caravana te haya resultado útil. Si deseas hacer alguna observación o comentario, puedes hacerlo dejando un mensaje al final del post. Te responderé lo antes posible. ¡¡Saludos y muchos kilómetros!!
👉 En la categoría Rutas en caravana encontrarás todas las rutas que realizamos con coche + caravana.
Todas las imágenes son propias, excepto cuando se indica otro autor / procedencia en el pie de foto.
Déjame darte mi mas sincera ENHORABUENA por tu BLOG tan completo de información.
Hola Pablo, muchas gracias. Sabes bien el trabajo que llevan estas cosas, por lo que el agradecimiento es doble. Saludos.
Hola Pablo!
Nosotros también somos de la zona de Tarragona y nos acabamos de comprar nuestra primera caravana.
Excelente blog, con muchísima información que, la verdad es que nos ha servido de mucho dada nuestra poca experiencia.
Te doy la enhorabuena y te animo a seguir con ello ya que facilitas mucho con tu experiencia a los que como nosotros nos iniciamos en este mundillo.
Un saludo,
Patxi
Hola Patxi! Muchas gracias. Sin duda un gran mundillo este del caravaning. Bienvenidos y a disfrutar. ¡Salud y Kms!!