Lo primero que hicimos al llegar a Montpellier, la ciudad natal del rey Jaime I el Conquistador, fue acercarnos a conocer nuestro alojamiento. Al viajar con caravana, este acostumbra a ser un camping. En este caso escogimos el Camping Fondespierre. Está ubicado a las afueras de la localidad de Castries, a unos 24 km de Montpellier, una media hora en coche.
No fue fácil encontrar un camping cerca de la ciudad. La primera opción fue el camping Le Plein Air des Chênes, en Clapiers, más próximo a Montpellier. Pero solo se permitía reservar una estancia mínima de no recuerdo cuantos días. El caso es que como solamente íbamos a pasar tres noches, tuvimos que buscar otra alternativa.
Así que llegamos a Castries pasadas las 2 de la tarde, en plena canícula estival. La carretera pasa por el interior del pueblo —sin dificultad alguna—, y saliendo de este encontramos el cruce que lleva al camping Fondespierre.
El camping es pequeño y rústico, con setos, encinas, pinos y algun olivo. Las parcelas son de tierra, y en algunas es necesario nivelar la caravana, ya que el suelo no es totalmente llano. Dispone de piscina, bar y parque infantil, todo en pequeño formato, proporcional al camping. Los campistas, jóvenes familias francesas en su totalidad, con muchos niños.
Desenganchamos la caravana y la dejamos instalada en la parcela, conectada a la toma eléctrica y con los depósitos de agua llenos. A continuación subimos al coche y nos acercamos a Castries. Nos hacía falta pan, y de paso tener controlados los supermercados y gasolineras más cercanos. Castries tiene unos seis mil habitantes, y es una localidad perfecta para avituallarse de todo lo necesario. Fácil aparcamiento, sin aglomeraciones, sin turistas ni mucho tráfico; tiendas de proximidad, supermercados, restaurantes, gasolineras…
Una vez de regreso al camping —a unos tres o cuatro minutos del pueblo en coche— nos dio tiempo de pasar un largo rato en la piscina. Allí pasamos buena parte de lo que quedaba de tarde. Mi hijo prácticamente no salió del agua, como un pez; yo alterné entre chapuzones y hamaca al sol, como un lagarto. Luego nos duchamos y a continuación empezamos a preparar la cena en la misma caravana. Llevamos muchas provisiones, sobretodo conservas y productos que no se estropean con el calor. Por cierto, a las duchas y wc’s del camping les faltaba una renovación. Pero no somos demasiado exigentes, y cumplieron su función.
Galeria de Fotos
Fecha de la estancia: 14 al 17 de agosto de 2019.
Enlace: Camping Fondespierre (Castries, cerca de Montpellier, Francia)
Ubicación Google Maps: https://g.page/flowercampingfondespierre34160?share
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